Descubre la forma más antigua y tradicional de surfear olas: el bodysurfing. Con solo tu cuerpo y unas aletas, podrás disfrutar de esta modalidad clásica del surf. Sigue leyendo para descubrir qué es el bodysurf, su historia, el material necesario, cómo y por qué deberías practicarlo.
¿Qué es el bodysurfing?
El bodysurf consiste en surfear olas usando tu cuerpo, sin necesidad de añadir ningún elemento adicional. A diferencia del surf tradicional, donde necesitas una tabla, en el bodysurfing tú mismo te conviertes en la tabla, donde usarás tus manos y pies para impulsarte y maniobrar en las olas.
Actualmente, se suele emplear el uso de aletas y una pequeña tabla de mano para ganar más velocidad y facilitar la actividad.
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Historia del bodysurf
El bodysurfing tiene sus raíces en tiempos antiguos. En particular, los hawaianos practicaban una forma de bodysurfing conocida como «he’e nalu». Durante el siglo XX, con la popularización del surf, el bodysurfing también ganó reconocimiento y se establecieron competencias específicas para esta modalidad.
Ahora, el bodysurfing es una disciplina respetada en el mundo del surf, con sus propios campeonatos y un montón de fans que prefieren la simplicidad de surfear sin tablas.
Equipamiento necesario
Como hemos explicado anteriormente, en un inicio no se requería de ningún equipo extra para practicar este deporte, pero según ha ido avanzando el bodysurfing, se han facilitado el uso de algunos materiales para mejorar la experiencia:
- Aletas: Las aletas son el elemento más básico en este deporte. Ayudan a impulsarte para poder atrapar las olas más fácilmente, proporcionando también más velocidad y potencia.
- Handboard, handplane o tabla de mano: El handboard es una pequeña tabla que se sujeta a una de mano. Esta tabla nos ofrece mejor flotabilidad y velocidad.
- Neopreno: Es importante usar el neopreno cuando la temperatura del agua sea baja. Ayuda a mantener el calor corporal.
Este equipamiento no es obligatorio, pero facilitan y mejoran la actividad.
¿Cómo hacer bodysurf? Técnicas básicas
Aunque parezca fácil, el bodysurfing requiere algo de técnica, por ello con el siguiente video aprenderás a como empezar a practicarlo. Si el inglés no es tu fuerte, tranquilo, debajo explico paso a paso los puntos importantes que debes tener en cuenta.
1. Domina la posición streamline
Empezaremos a practicar el bodysurfing cerca de la orilla donde el agua llegue hasta los muslos. Deberás observar las olas y buscar una que rompa lejos. Cuando la ola se acerque a ti, antes de que te golpee, baja el pecho al agua, extiende los brazos y lánzate hacia adelante. Esta posición se llama streamline o flecha en castellano.
Mantén el cuerpo largo y recto, como Superman, pero con la cara sumergida. Recuerda coger aire antes de meter la cabeza bajo el agua y libéralo suavemente por la nariz para evitar que entre agua una vez dentro.
El objetivo de esta posición es mantenerse plano como una tabla sin hundirte para que te deslices por la superficie de la ola.
2. Practica la posición de streamline con aletas
Una vez que domines la técnica de streamline, comienza a practicarlo con aletas. Colócate donde el agua te llegue hasta la cintura y vuelve a repetir el procedimiento anterior. Cuando la ola esté llegando, empieza a aletear y, una vez que sientas su impulso, mantén las aletas detrás de ti como si fuera una cola de un delfín.
3. Adéntrate más con aletas y el handplane
El siguiente paso para seguir avanzando en el bodysurf, será adentrarse en aguas un poco más profundas, donde en vez de impulsarte con los pies desde el suelo, usaras las aletas para ganar impulso.
Observa y elige una ola que no haya roto aún, cuando la ola esté llegando hacia ti, coloca el handboard en frente de ti con los brazos estirados y comienza a aletear. Sigue aleteando hasta que la ola te impulse, luego estira el cuerpo y colócate en la posición de streamline.
¿Por qué practicar bodysurfing?
Si te interesa saber qué beneficios tiene el bodysurfing, aquí te explicamos todas las ventajas que tiene practicarlo:
- Fácil de aprender: Al tener poco material, lo único que tendrás que aprender para empezar será la postura en el agua con tu cuerpo, que con un poco de práctica, dominaras en seguida.
- Económico y accesible: Es un deporte barato, ya que puedes comenzar a practicarlo sin ningún equipamiento, y en todo caso con unas aletas y un handboard (opcional), que se pueden conseguir de manera asequible. Lo único que sí necesitaras es una playa y algunas olas.
- Conexión con la naturaleza: Al practicar bodysurfing estas en contacto directo el mar, lo que hace que conectes con el océano, te relajes y te sientas como pez en el agua.
- Diversión: Es un deporte divertido que puedes practicar en verano con familiares y amigos, y competir por quien coge la mejor ola.
- Mejora de la condición física: El bodysurf te mantiene activo y ejercitas todo el cuerpo al tener que usarlo en todo momento.
